
Carlos Alcaraz se mostró entusiasmado en la noche del sábado tras conseguir algo que nadie había logrado en 2024 - derrotar a Jannik Sinner.
Ambos disputaron un intenso duelo a tres mangas en las semifinales del BNP Paribas Open, donde el español encontró la manera de remontar por 1-6, 6-3, 6-2 en California.
La teoría marcaba a Sinner como favorito para vencer al murciano, situado un puesto por encima en el PIF ATP Rankings pero sin finales disputadas desde el pasado agosto tras haber perdido sus últimas cuatro semifinales. El No. 2 mundial, sin embargo, se encargó de romper esa tendencia y la racha de 16 partidos ganados por Sinner en el inicio de la temporada 2024.
"Me siento muy feliz por estar en otra final", dijo el español en su rueda de prensa posterior al partido. "Significa mucho para mí jugar a este nivel y regresar a otra final. Derrotar a Jannik, con quien mantengo una gran rivalidad, y detener su racha de 16 victorias, es algo increíble para mí".
El historial Lexus ATP Head2Head entre Alcaraz y Sinner mantiene ahora un empate técnico (4-4). El español había quedado en desventaja tras perder sus últimos dos partidos ante el italiano, pero empleó esas experiencias como motivación para remontar un duro primer set y mantener vivas sus esperanzas en Indian Wells.
"Siempre que enfrento a Sinner me pongo algo nervioso", reconoció Alcaraz. "Sé que debo jugar al 100% si quiero tener opciones de derrotarle. No me tensa verme por detrás en el cara a cara, me aporta una motivación adicional para darlo todo y ganarle en ese duelo directo".
"Intento jugar a mi mejor nivel en cada partido ante él, quiero alcanzarle. Creo que hoy lo he logrado. Ahora mismo estamos empatados si no me equivoco. La próxima vez que nos enfrentemos no voy a estar pensando en ello".
Un signo característico de la rivalidad entre Alcaraz y Sinner es la enorme conexión que la grada genera en sus partidos. Las cosas no fueron diferentes este sábado en el Indian Wells Tennis Garden, donde el zumbido de los espectadores acompañó otro duelo memorable repleto de grandes intercambios.
"Es increíble jugar partidos así con este ambiente", dijo Alcaraz. "Como dije tras el partido, siento como si jugara en casa. Es una locura estar en la otra punta del mundo y sentir esa energía y ese cariño tan cercanos. Es algo increíble".
"Siempre que juego ante Jannik, creo que por ambas partes, es una batalla tremenda. Para la grada es un partido sensacional y siento que disfrutan siempre que nos enfrentamos. La energía que aporta la gente es algo muy especial".