
Nuno Borges es uno de los mejores jugadores del mundo. El portugués No. 1 es campeón del ATP Tour, ha derrotado a grandes jugadores como Rafael Nadal y es el No. 33 en el PIF ATP Rankings. El viernes, el jugador de 27 años podría alcanzar la cuarta ronda del Abierto de Australia por segundo año consecutivo cuando se enfrente al tercer favorito Carlos Alcaraz.
Pero si bien Borges es extraordinario en la cancha, fuera de ella es como cualquier otra persona.
“En 2023 estoy bastante seguro de que fui al Zoológico de Melbourne con mi fisioterapeuta. No sé si mi entrenador no quería o algo así. No estaba interesado, así que convencí a mi fisioterapeuta para que me acompañara”, dijo Borges a ATPTour.com. “Lo creas o no, ¡fuimos al Zoológico de Melbourne y no pudimos ver los canguros ni los koalas!”
“Era el día más caluroso de la semana, había como 36 grados. Los koalas ya estaban dormidos y el hábitat de los canguros estaba en construcción o algo así y lo estaban remodelando. Así que, literalmente, no había ninguna posibilidad. Así que vine a Australia y no pude ver canguros”.
Un año después, Borges disfrutó de su torneo revelación. Con apenas dos victorias en siete majors anteriores, el portugués avanzó a los octavos de final y puso a prueba al eventual finalista Daniil Medvedev en un ajustado partido de cuatro sets. Después, estuvo decidido a conocer a algunos animales australianos y tomar revancha de un año atrás.
“Fui a un santuario y pude acariciar a un koala y todo, así que siento que tuve mi experiencia”, dijo Borges. “¡También había ualabíes caminando por aquí!”.
Fuera de las visitas a los animales, a Borges le encanta hacer rompecabezas; por lo general hace un par de los más grandes al año. Pero le resulta difícil hacerlo cuando está de viaje.
“¿Cómo viajaría con él de regreso? Tendría que enmarcarlo y enviarlo. La logística no es muy buena. Al final tendré que tener tiempo, al menos una semana o dos en casa, en Lisboa o en Oporto, para poder instalarme y armar uno”, dijo Borges. “No quiero armar el 20 por ciento del rompecabezas y dejarlo ahí mientras me voy a Australia, y luego volver a él, porque entonces no tengo el ritmo. Podría hacerlo cuando tenga mi propio lugar, tal vez pueda hacerlo, pero nada ha cambiado realmente”.
“No tengo tanto tiempo en casa para hacer mucho más. Si haces un rompecabezas de 1500 piezas, lleva tiempo. No es como si lo hicieras solo en un fin de semana. Imposible”.
Borges publicó un video en pretemporada en sus redes sociales horneando cupcakes de arándanos. Pero también es fan de cosas más aventureras como los parques temáticos. Le encantaría visitar Disneyland en Hong Kong o una atracción en Tokio.
“Mientras estoy en competencia, me gusta mantenerme bastante concentrado, porque si voy a parques temáticos y cosas así, puede ser bastante agotador: mucho tiempo de espera en la fila y todos los altibajos de la adrenalina”, dijo Borges. “Quizás tampoco quieras pasar por eso antes de un partido, aunque puede ser muy relajante, especialmente jugando un Grand Slam al mejor de cinco sets. Creo que si puedes ahorrar energía, tal vez sea prudente hacerlo, así que guardaré todas las actividades para después”.
Su enfoque está puesto en enfrentar a Alcaraz, quien ganó el único duelo Lexus ATP Head2Head entre ambos. Fue en Barcelona hace dos años. Borges conoció al español por primera vez en un evento del ITF World Tennis Tour en Martos, España, en junio de 2019. Era el sexto torneo profesional de la carrera de Alcaraz.
“Recuerdo que tenía 16 años, ya pegaba muy fuerte, ya era un jugador muy, muy prometedor. Todos ya lo conocían”, dijo Borges. “Recuerdo haberlo visto en el Challenger de Oeiras, donde entrenaba… Lleva un tiempo en el circuito, pero ha llegado a lo más alto, muy rápido. Va a ser un gran desafío”.
Borges cree que Alcaraz se ha desarrollado tanto física como mentalmente a pesar de tener solo 21 años.
“Cuando tenía 16 años, estoy seguro de que era muy diferente, pero creo que su tenis ya estaba ahí”, dijo Borges. “Recuerdo que ya golpeaba bastante fuerte, así que creo que eso es lo que vemos hoy en día”.