Sebastian Korda recuerda cuando era un junior corriendo por los terrenos del Mubadala Citi DC Open. Su padre, Petr Korda, entrenaba a Radek Stepanek, el campeón de 2011.
Ahora "Sebi" no corretea por el salón y los vestuarios, sino que atrae a los aficionados a la pista con su poderoso juego. El tenista de 23 años es el octavo cabeza de serie esta semana en la prueba ATP 500.
"Washington tiene que ser una de mis paradas favoritas en el circuito, por haber estado aquí cuando era un niño de 12, 13 y 14 años con mi padre y Radek Stepanek", dijo Korda a ATPTour.com. "Vivirlo todo fue genial. Estar en el vestuario por primera vez y estar rodeado de jugadores, tengo un montón de buenos recuerdos de este torneo. Es muy especial".
El domingo, el estadounidense se estaba refrescando en una bicicleta en el gimnasio de los jugadores cuando vio una foto de su mentor, el ex número 1 del mundo Andre Agassi, en la señalización exterior.
"Le envié un selfie conmigo y con él con la placa detrás", dijo Korda. "Es una persona muy especial para mí. En cierto modo, es una especie de miembro de la realeza del tenis, y tener a alguien así a mi lado es algo muy especial".
Casualmente, Agassi jugó contra el padre de Korda, Petr, en la final de Washington de 1991. Agassi ganó el partido por 6-3 y 6-4 y consiguió uno de sus cinco títulos en el torneo.
"Estoy seguro de que Andre jugaba partidos nocturnos todos los días y mi padre jugaba el primero a la una, cuando hacía mucho calor", dijo Korda, riendo. "Y creo que Andre se cargó a mi padre en la final".
Agassi se ha convertido en un valioso guía para Korda. El 60 veces campeón del circuito observa a menudo los partidos de su pupilo y le da su opinión.
"Ve la vida de una forma diferente a los demás. Es una persona muy positiva y extrovertida, tiene un corazón enorme. Haría cualquier cosa por la gente que le rodea", afirma Korda. "Es un gran ser humano. Su forma de ver el tenis es muy diferente. Piensa en cosas diferentes a las de los demás. Piensa en lo que puede hacer para obtener una mayor ventaja en el tenis".
Este es el primer torneo de Korda en pista dura. La superficie suele favorecer el potente juego de fondo del estadounidense.
"Me encanta jugar en pista dura, sobre todo en Estados Unidos", dijo Korda. "Creo que es muy divertido jugar aquí. Todo está muy cerca. Todos los aficionados son geniales. Es muy cómodo estar aquí en un país en el que has crecido y todo es súper fácil."
Korda comenzó su temporada en lo más alto al alcanzar una final ATP 250 en Adelaida, manteniendo el punto de campeonato contra Novak Djokovic antes de quedarse a las puertas. Luego avanzó a cuartos de final del Abierto de Australia con victorias sobre Daniil Medvedev y Hubert Hurkacz en el camino.
Tras retirarse en cuartos de final por una lesión en el codo, Korda no volvió a jugar hasta abril en Madrid. Ahora está entusiasmado con el resto de la temporada.
"Empecé muy bien y hubo una especie de bache de velocidad en el medio, pero hay cosas por las que tienes que pasar como tenista", dijo Korda. "Aprendes de ellas y sigues adelante. Estoy agradecido por mi viaje ahora mismo y no podría estar más feliz de volver a jugar a un alto nivel."
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