
Nick Kyrgios competirá por segunda vez esta temporada cuando pise la hierba de Wimbledon este lunes. Sus preparativos para el Grand Slam de césped se han visto marcados por una recurrente lesión de rodilla que le ha apartado de la competición durante los últimos meses.
Aunque las dudas acerca de su estado físico siguen presentes, Kyrgios considera estar preparado para competir y se enfoca simplemente en el corto plazo.
"Todavía hay algunos interrogantes", dijo Kyrgios durante su conferencia de prensa previa al torneo este domingo. "Obviamente, el tenis a cinco sets es una realidad completamente distinta. Si observo mi preparación del año pasado al llegar aquí, quizá fuera la más ideal posible. No podría tener una realidad más diferente este año".
"Pero insisto, no voy a desmerecer el trabajo que he hecho durante los últimos seis meses para mantener mi forma física y regresar a las pistas. He entrenado con jugadores muy buenos esta semana y mi cuerpo se siente bien. Voy a ir día a día, no quiero mirar al futuro y colocarme expectativas exageradas. Voy a intentar hacer todo lo que pueda, prepararme, salir y jugar un buen tenis".
Kyrgios se sometió a una operación de rodilla en enero, cediendo en dos mangas su único partido de la temporada ante Wu Yibing sobre la hierba de Stuttgart semanas atrás. El australiano explicó que ha estado trabajando duro para regresar lo antes posible, encontrando un reto en su tiempo fuera de las pistas.
"He sido muy disciplinado durante este período. Apenas he faltado a ninguna fase del proceso. He trabajo muy duro, intentando hacer todo lo posible. Me siento todo lo bien que puedo sentirme en este momento", dijo Kyrgios.
"En cierto modo, fue bueno pasar tiempo en casa. Obviamente también era algo desagradable", añadió Kyrgios. "El año pasado sentí que todas las piezas encajaron. Llegué a la final de Wimbledon, apenas perdí partidos,... Tuve una de las tres mejores temporadas del circuito. Obviamente mi cuerpo estaba pidiendo un descanso. Necesitaba hacerlo. Ha sido brutal y muy duro".
Kyrgios conserva recuerdos muy agradables de Wimbledon, donde alcanzó su primera final de Grand Slam el año pasado. El australiano, que debutará ante David Goffin, espera usar esa experiencia en beneficio propio durante esta quincena.
"Siento una gran confianza. Nunca he sido un jugador que necesitase muchos partidos antes de competir en un Slam. Siempre fui uno de esos que no juegan demasiado", dijo Kyrgios. "Lo que he logrado en mi carrera jamás se borrará. Siempre se queda en ti. El año pasado, no hace tanto tiempo en realidad, sentí que sacaba mejor que nunca. Sigo siendo capaz de batir a muchos rivales en la pista. Solo debo ir día a día".