Maxime Cressy caminó por la cuerda floja el martes en Marsella, pero al final encontró la manera de ganar.
El estadounidense, que iba ganando set y break, derrotó al invitado francés Geoffrey Blancaneaux por 6-3, 6-7(5), 7-6(4) tras dos horas y 50 minutos para alcanzar la segunda ronda del Open 13 Provence.
"Una batalla increíble. Ha luchado hasta el final", dijo Cressy. "Tuve que mantenerme extremadamente concentrado en lo que puedo controlar y creo que lo hice con mucho éxito”.
Cressy logró 22 aces y ganó el 83% de los puntos con su primer saque. Pero el momento crítico llegó al resto en el tie-break final. Con Blancaneaux al servicio con 4-5, Cressy restó una derecha que resultó ser la ventaja decisiva que necesitaba.
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"En el tie-break me dije a mí mismo: 'Déjate llevar, gana todos tus puntos de saque y no te preocupes por el resto'", explicó Cressy, que jugará contra el francés Benjamin Bonzi. "Así es como trabajo. Tengo que dejarme llevar y no pensar y entonces funciona. Muy difícil”.
En otro partido del día, el holandés Gijs Brouwer remontó ante el sueco Elias Ymer 3-6, 7-5, 6-3 para ganarse un encuentro con el campeón de las Nitto ATP Finals 2017 Grigor Dimitrov. El jugador de 26 años se encuentra en el puesto 116 del Pepperstone ATP Rankings y la semana pasada alcanzó los cuartos de final en Róterdam, donde derrotó a Holger Rune en la segunda ronda.
El francés Gregoire Barrere también pasó a la segunda ronda en Marsella con una victoria por 6-3 y 6-2 sobre el zurdo suizo Marc-Andrea Hustler. Barrere se enfrentará al kazajo Alexander Bublik por un puesto en cuartos de final.