
Por segundo día consecutivo, Carlos Alcaraz entrenó en las pistas de Roland Garros para preparar su debut del próximo lunes ante Giulio Zeppieri, la primera parada en su camino para defender la Copa de los Mosqueteros. El español, que compartir sesión de práctica con Francisco Cerúndolo, se sentó luego ante la prensa por primera vez en el torneo para valorar lo que tiene por delante.
“Tengo buenas sensaciones”, avisó Alcaraz. “Ayer noté una gran diferencia en cuanto a condiciones, pero hoy he sentido la bola un poco mejor”, añadió el español. “No busco nada en específico, sino encontrarme bien y cómodo. Quiero intentar poner mi juego en los entrenamientos y no pensar en cómo voy a empezar el torneo, cómo va a ser el primer partido”, continuó el No. 3 del PIF ATP Rankings. “Sobre todo, quiero darle alegría a mi juego. Eso es lo que siempre intento hacer en cada partido, y en cada entrenamiento. No sentir ningún miedo a nada. No pensar en intentar ser más sólido. Quiero pasármelo bien, hacer las cosas que me divierten. Y así creo que voy a estar preparado para empezar el torneo”.
Alcaraz, que llega a Roland Garros con los títulos de Montecarlo y Roma bajo el brazo, además de la final de Barcelona, fue cuestionado sobre si se siente superior a sus demás rivales en tierra batida, y sobre si considera que los partidos dependen de él, pasando por su raqueta.
“Yo sinceramente tampoco lo siento así”, explicó el español. “Obviamente Jannik [Sinner] ha tenido una semana increíble en Roma, pero venía de tres meses parado y esa falta de competición se nota, sobre todo cuando vas avanzando en torneos importantes”, dijo sobre el No.1, al que el año pasado venció en las semifinales de Roland Garros. “Yo también he tenido momentos difíciles y partidos muy duros en los que podría haber perdido perfectamente, pero sí que me estoy encontrando muy cómodo, me estoy sintiendo muy bien. Estoy muy contento con el nivel que estoy alcanzando, pero la gran parte de los torneos y de los partidos sí que siento que dependen de mí, de si encuentro el buen camino, si encuentro la buena dirección, de cómo me siento, de si estoy disfrutando o no… Ese tipo de cosas influyen mucho en mi manera de jugar”.
Precisamente, Alcaraz no se enfrentaría a Sinner hasta una hipotética final en París. Después de verse las caras hace unos días en el partido por el título en Roma, y con el español dominando por 7-4 su serie Lexus ATP Head2Head frente al italiano, muchos aficionados podrían pensar que el joven de 22 años le tiene pillada la medida a su rival… nada más lejos de la realidad, según el propio Alcaraz.
“Lo he dicho muchas veces: nuestra rivalidad es muy bonita porque nuestros partidos son muy tácticos”, aseguró el español. “Estoy seguro de que él, la próxima vez que nos enfrentemos, va a cambiar cosas, va a intentar mejorar. Y yo también voy a intentar mejorar para intentar ganarle de nuevo”, dijo el murciano. “Es lo que ha hecho el Big-3 durante todos estos años. También ha habido rachas muy buenas de Rafa [Nadal] ganándole a Djokovic, luego viceversa con Federer y lo mismo. Habrá rachas y yo tengo que estar preparado porque sé que no voy a ganarle todos los partidos, eso es así y no podemos ganar siempre”, razonó. “Cada vez que me enfrento a él es una batalla mental, táctica y física al máximo nivel. Así que hay que estar preparado para todo lo que pase”.
Alcaraz debutará el lunes contra Giulio Zeppieri, en Roland Garros, donde busca el quinto Grand Slam de su carrera.