Si la carrera de Marat Safin se distinguió por momentos de genialidad, en el año 2000 todas las piezas encajaron para que cuajara una consistente temporada.
Safin ganó siete sus 15 títulos ATP Tour desde abril hasta noviembre de ese año. Esa racha de éxitos fue algo inesperado para el joven talentoso de 20 años que había empezado su tercer año completo en el circuito sin demasiado brillo, pero acabó en un momento de forma tan alto que le sirvió para convertirse en el decimoctavo No. 1 en la historia del PIF ATP Rankings el 20 de noviembre.
Después de iniciar el año 2000 con 11 derrotas en sus primeros 16 partidos, Safin se presentó en el Barcelona Open Banc Sabadell como el No. 35 del mundo. Seis victorias más tarde, levantó su segunda corona ATP Tour, tras una gran actuación que incluyó los triunfos frente a los Top 10 Nicolás Lapentti y Magnus Norman, además del favorito local Juan Carlos Ferrero en la final.
Safin se estrenó en el Top 20, después de levantar el título en Cataluña. Quizás lo más importante es que ese resultado hizo ‘click’ en su temporada. Fue un punto de inflexión. Volvió a ganar un nuevo trofeo una semana más tarde en tierra batida en Mallorca y alcanzó su segunda final ATP Masters 1000 en Hamburgo, poco antes de acabar logrando su primer título de esa categoría en Toronto a comienzos de agosto.
En septiembre, en Nueva York, Safin se impuso a Pete Sampras en tres sets con una espectacular actuación para levantar su primer Grand Slam en el US Open. Los trofeos en pista dura en Tashkent y St. Petersburgo, así como otro Masters 1000 más en moqueta cubierta en París completaron su palmarés en 2000. Desde el inicio de Barcelona en abril, Safin registró un récord de 68-16 a lo largo del resto del año.
Tras ascender al No. 2 después del US Open, fue su triunfo en París el que permitió a Safin ascender a la cima. A sus 20 años y 10 meses, se convirtió en ese momento en el jugador más joven en alcanzar el No. 1 del PIF ATP Rankings, aunque ese récord sería pulverizado más adelante por Lleyton Hewitt (en 2001) y, recientemente, por Carlos Alcaraz (2022).
En el cierre del curso en las Nitto ATP Finals (entonces llamada Tennis Masters Cup), Safin necesitaba tres triunfos para garantizar terminar el año como No. 1 (ATP Year-End No. 1 presented by PIF), pero perdió en la fase de grupos con Sampras y en semifinales ante Agassi, lo que concedió a Gustavo Kuerten arrebatarle este privilegio. A pesar de esa decepción final, el ascenso de Safin al No. 1 permanece como una de las trayectorias en seis meses más memorables de la historia de la ATP, algo que el propio Safin reconoció más tarde que fue una sorpresa incluso para él.
“Mi experiencia de alcanzar el No. 1 y ser el No. 1 fue muy extraña”, reveló a ATPTour.com Safin, que volvió en dos ocasiones a la cima en 2001 y pasó un total de nueve semanas en lo alto. “No estaba preparado para ello porque no podía imaginar unos meses antes que tendría la oportunidad de ser el No. 1. Estaba en el Top 50, bajando posiciones y jugando muy mal. Me subestimaba a mí mismo y me veía más débil que mis rivales, era increíble”.