Cuando Pete Sampras ganó su último partido profesional, venciendo a Andre Agassi en la final del US Open 2022, extendió el récord con su 14º título de Grand Slam e igualó la plusmarca de Jimmy Connors con cinco trofeos individuales masculinos del US Open. El estadounidense también cerró su carrera habiendo permanecido 286 semanas como No. 1 del PIF ATP Rankings.
Esos registros parecían insuperables en aquel momento, pero todos ellos fueron igualados o superados por el Big 3. Sin embargo, todavía queda un récord de Sampras que permanece intocable: sus seis cierres de año consecutivos como No. 1 entre 1993 y 1998. Roger Federer logró este hito durante cuatro años seguidos (2004-07) y Novak Djokovic lo firmó en temporadas consecutivas hasta en tres ocasiones. Por su parte, Rafael Nadal nunca cerró como No. 1 dos temporadas seguidas.
"Es un logro maravilloso. Quizá nunca sea batido", dijo Sampras sobre la proeza, consumada el 26 de noviembre de 1998. "Intento ser humilde con ello, pero es un récord que habla por sí mismo. Es un poco abrumador".
Durante los seis años de reinado de Sampras, el estadounidense fue derrocado de la cima en seis ocasiones distintas. No obstante, siempre recuperó su lugar en el trono del PIF ATP Rankings.
En ninguna temporada vivió una lucha tan feroz por los honores a final de año como en 1998. cuando Marcelo Ríos le desbancó en dos ocasiones del No. 1 durante un total de seis semanas. Tras perder en las semifinales del US Open ante el campeón Patrick Rafter, Sampras conservó una mínima ventaja sobre el chileno en la cima del PIF ATP Rankings. Los dos últimos meses de la temporada ATP Tour decidirían si Sampras rompía o no el récord de Connors con cinco cierres de curso seguidos en la cima.
En un pulso total por superar a Ríos, Sampras disputó siete torneos ATP Tour entre octubre y noviembre. Ríos compitió en seis torneos en esa lucha por llegar a la línea de meta.
"No fue divertido, siendo sincero", dijo Sampras. "Tenía la oportunidad de romper este récord, una marca de todos los tiempos con seis años consecutivos. Me dije: 'de acuerdo, vas a tener que volver allí [a Europa] durante otras tres o cuatro semanas. Lo haré'. Y lo hice".
"Me sentí genial, pero me pasó una gran factura emocional, incluso en los años siguientes. Es muy duro permanecer en el No. 1, y hacerlo durante seis años seguidos... En mi carrera, miro atrás y he ganado muchos Grand Slam, he logrado grandes cosas, pero estar en el No. 1 todos esos años fue mi mayor gesta, ser así de dominante. No era permanecer en el No. 1 durante seis meses o un año, sino cimentar esa posición".
La odisea de Sampras en 1998 comenzó con una derrota en la primera ronda de Basilea, antes de levantar su cuarto título del año la semana siguiente como invitado en Viena. A su vez, Ríos había ganado el título en Singapur. (La plaza de Sampras en Viena llegó por cortesía de Boris Becker, quien le ofreció su propia invitación al estadounidense). Ambos viajaron a Lyon a continuación, pero renunciaron al torneo por fatiga. Sampras se bajó antes de los cuartos de final por una lesión de espalda, antes de que Ríos se retirase en las semifinales ante Tommy Haas.
A continuación, llegaban los ATP Masters 1000 de Stuttgart y París. Si Ríos alcanzó los cuartos de final en ambos, Sampras llegó a semifinales y final en sus respectivos torneos, ampliando su ventaja en el PIF ATP Rankings.
Sin embargo, Sampras se atascó en Estocolmo, donde el peaje mental del tramo final de temporada se hizo evidente. Tras perder el tiebreak del primer set antes de caer en tres mangas con el No. 29 mundial Jason Stoltenberg, el estadounidense firmó un episodio poco habitual lanzando su raqueta con furia.
"El circuito europeo de otoño no es un picnic", escribió Sampras en su biografía 'Mentalidad de Campeón'. "Hace frío, anoche temprano y te ves jugando partidos nocturnos en estadios enormes bajo iluminación artificial. Después de una larga temporada de Grand Slams, sientes que estás viviendo en un universo paralelo y extraño".
Sin embargo, la visita de Pete a Estocolmo dejó una ventaja: le dio dos semanas libres antes del ATP World Tour Championships (ahora las Nitto ATP Finals), donde se decidiría el No. 1 de final de año.
Sampra aterrizó en Hannover con apenas 33 puntos de ventaja en el PIF ATP Rankings, lo que le obligaba a igualar o mejorar el resultado de Ríos para asegurar el No. 1. Con esa presión sobre los hombros, Sampras recuperó su mejor forma en la fase de grupos, sellando un 3-0 con apenas 15 juegos perdidos en seis mangas ante Yevgeny Kafelnikov, Carlos Moyà y Karol Kucera.
Aunque el estadounidense fue derrotado por el campeón Alex Corretja en las semifinales - dos años después del duelo épico en cuartos de final del US Open 1996 ante el español, en el que vomitó sobre la pista - había asegurado el No. 1 a final de año antes de terminar la fase de grupos. Ríos, después de perder ante Tim Henman su duelo inicial en el round robin, tuvo que retirarse del torneo con una lesión de espalda, confirmando a Sampras como No. 1. El estadounidense se encontraba comiendo pasta en el hotel al recibir la noticia.
Los seis cierres de año consecutivos como No. 1 de Sampras siguen siendo un récord del PIF ATP Rankings. Solamente Sampras y Djokovic, que ha cerrado ocho cursos como No. 1 mundial, han logrado este hito en más de cinco ocasiones.