
Alcanzar el No. 1 del PIF ATP Rankings es un hito inusual. Conseguirlo a una edad temprana, una hazaña todavía más extraordinaria. Pregúntenle a Pete Sampras.
Con apenas 21 años, el estadounidense se convirtió en el 11º jugador capaz de llegar a la cima el 12 de abril de 1993. A lo largo de su brillante carrera, Pete entraría en la historia al permanecer durante 286 semanas en el No. 1 mundial. Sampras, actualmente el octavo No. 1 más joven, ocupa la tercera plaza histórica por semanas en el trono, tras Novak Djokovic (428) y Roger Federer (310).
Una notable temporada 1992, decorada con cinco títulos individuales, preparó el terreno para el ascenso de Sampras un año después. Aunque su gran rival Lexus ATP Head2Head de los años 90, Andre Agassi, era valorado por un tenis completo, Sampras dominó el circuito con un estilo agresivo repleto de subidas a la red. Un patrón implacable en la temporada 1993.
Sampras comenzó el año con un inmenso balance de 30-3, atrapando títulos en Sídney, Tokio, Hong Kong y el ATP Masters 1000 de Miami. La final en el Causeway Bay District de Hong Kong sirvió como escenario clave hacia la cima. Sampras completó una victoria épica de tres horas sobre Jim Courier para arrebatarle el trono y ascender al No. 1 del PIF ATP Rankings por primera vez.
Pocos podrían haber anticipado el nivel de dominio que Sampras mantendría durante los siete años siguientes. El estadounidense logró un hito sin precedente cerrando seis años consecutivos como No. 1 del PIF ATP Rankings entre 1993 y 1998. Su reinado sin interrupción más amplio se extendió durante 102 semanas (15 de abril de 1996 - 29 de marzo de 1998), siendo la quinta marca más larga en la historia del ATP Tour.
Sampras completó una carrera legendaria levantando su 14º título de Grand Slam en el US Open 2002, convirtiéndose en el único jugador capaz de ganar el último torneo de Grand Slam en el que ha participado.
"Cualquier niño sueña con ser No. 1 mundial, es una ilusión cuando eres pequeño, pero realmente no lo dices en serio", aseguró Sampras a ATPTour.com en 2018. "Mi objetivo siempre era ganar Wimbledon, ser mencionado junto a Laver y Rosewall, pero ser No. 1 era la guinda del pastel. Conservar el No. 1 era lo más complicado. Necesitas corazón, mentalidad y talento para ser No. 1 durante años".