Tsitsipas: "Ser No. 1 Del Mundo Ha Sido Mi Sueño Desde Que Era Un Niño"

Stefanos Tsitsipas sabe lo que se necesita para ganar las Nitto ATP Finals. Después de reclamar el título en Londres en su debut en 2019, el griego espera crear nuevos recuerdos en Turín, donde su actuación en 2021 se vio interrumpida por una lesión en el codo.

Si el segundo sembrado puede recuperar el título en el torneo de fin de año como un campeón invicto, terminará la temporada como No. 1 del Pepperstone ATP Ranking.

“De hecho, estoy muy decidido y soy extremadamente privilegiado de estar en una posición para luchar por el puesto número 1 del mundo, porque ser coronado como el número 1 del mundo siempre ha sido un sueño mío desde que era un niño”, dijo a ATP Media antes del evento.

“Definitivamente significaría mucho. Es increíble lograr algo como esto. Voy a tratar de estar relajado, disfrutar el proceso, no pensar demasiado en el destino, pero el viaje es lo que más importa. En este caso, jugar un buen tenis y divertirme en la cancha es mucho más importante que obsesionarse con el título de No. 1 del mundo, que puede llegar ahora o más tarde. Es más una maratón que un sprint”.

Si bien el griego admitió que los nervios por su oportunidad de llegar al No. 1 contribuyeron a su eliminación en la primera ronda del US Open, donde un título lo habría elevado al primer puesto, ingresa a Turín con una mentalidad fresca, lleno de confianza después de un temporada consistente en la que capturó dos títulos y ganó 60 partidos en la gira (marca líder en el año).

“Me siento muy bien con mi cuerpo y mi juego”, dijo. “Estoy contento de estar aquí luchando por algo prestigioso en este tipo de eventos. Me gané mi lugar jugando tenis consistente durante todo el año y con buenos resultados en casi todas las superficies. Resultó mejor de lo que pensé que sería, y estoy feliz ahora, sentado en esta silla, siendo parte de los ocho mejores jugadores del mundo”.

El dos veces campeón de Montecarlo superó con creces sus propias expectativas a principios de año cuando llegó a las semifinales del Abierto de Australia solo dos meses después de una cirugía en su codo dominante.

“No estaba pensando en las mejores cosas en ese momento y mi mente estaba muy ocupada pensando en cómo me iba a recuperar de eso, cómo iba a volver más fuerte”, explicó Tsitsipas. “Honestamente, no tenía ninguna expectativa durante el comienzo del año. Pensé que me recuperaría más tarde durante el año, tal vez en medio de la gira de la cancha de arcilla. Mi médico me dijo que podría tomar algún tiempo”.

“Pude producir un tenis realmente bueno en el primer Grand Slam del año, jugando sin muchas expectativas, diría, cuando estaba en la cancha. Seguí acumulando muchos puntos al principio de la temporada, y eso me dio una señal, una idea de dónde estaba parado con mi juego, que no debía retroceder, que esta era una oportunidad que realmente podía usar”.

Atraído en el cargado Grupo Rojo en Turín, donde se le unen los ex campeones de las Nitto ATP Finals Novak Djokovic y Daniil Medvedev, así como el peligroso Andrey Rublev, Tsitsipas tiene mucho trabajo por delante en el Pala Alpitour. Él no lo esperaba de otra manera.

“No se supone que sea fácil, ¿verdad?”, dijo con una risa. “Este tipo de eventos no se realizan muy a menudo durante el año. Es el único evento del año que es tan exigente, donde la intensidad es tan alta. Independientemente de con quién te vayas a enfrentar, simplemente no importa. Todos estos jugadores pueden jugar. Estamos bastante parejos”.

“Hasta que salimos a la cancha, es la psicología que pones ahí, es el trabajo duro que tienes que inculcar para obtener un buen resultado y [asegurarte] de que nada se salga de lugar”.

Tsitsipas abre el juego el lunes por la noche contra Djokovic en una revancha de su emocionante semifinal en el Rolex Paris Masters, que resultó en victoria por 6-2, 3-6, 7-6(4) para el serbio. Ese resultado dejó en 9-2 el récord ATP Head2Head de ‘Nole’ contra Tsitsipas.