
No es una casualidad: Jannik Sinner y Carlos Alcaraz se han repartido los últimos siete títulos de Grand Slam (desde el Abierto de Australia de 2024). Italiano y español, los dos primeros jugadores del PIF ATP Rankings, han dominado el ATP Tour con puño de hierro, como demuestran los resultados. Ahora, antes de que arranque el US Open para los dos (Alcaraz se estrena este lunes con Reilly Opelka, Sinner lo hace el martes con Vit Kopriva), el vestuario sigue con atención lo que están haciendo los dos jóvenes mientras intentan darles caza.
“Creo que ahora mismo hay muchos jugadores que están ahí y tienen muy buen nivel”, analizó el español. “Obviamente, Jannik ha mostrado mucha superioridad. A mí, muchas veces, me han ganado y me han hecho partidos mucho más difíciles que quizás a él. Pero últimamente los resultados han mostrado que ambos hemos estado ahí”, siguió.
“Al final, el que se lo merezca estará”, dijo Alcaraz. “El que trabaje para estar ahí, lo conseguirá. Hay gente con un nivel altísimo que quizás ahora están pasando por un momento difícil, pero seguro que volverán a su mejor versión. Personalmente, yo intento mejorar cada día, ver muchos partidos, tanto de Jannik como de otros, para ver qué puedo hacer mejor y ponerles en problemas lo máximo que pueda. El tenis evoluciona, tanto en pistas como en pelotas, y los jugadores no nos podemos estancar. Hay que seguir creciendo”.
Ese “seguir creciendo” del cinco veces campeón de Grand Slam también apunta directamente a Sinner, su máximo rival por los grandes títulos del circuito. A pesar de que domina su serie Lexus ATP Head2Head contra el italiano por 9-5, Alcaraz sabe el peligro que representa el No. 1, y la posibilidad real que hay de encontrarse de nuevo en Flushing Meadows si ambos avanzan hasta la gran final.
“Sería algo increíble”, reconoció el murciano. “Los últimos tres Grand Slams en pista dura los ha ganado él. El nivel de tenis que está mostrando en estas superficies es impresionante, y en cierto modo lo tomo como referencia para estar preparado si tengo que enfrentarme a él”, añadió. “Ojalá podamos vernos en la final. Sería un gran resultado tener una buena actuación aquí… y si le gano, mucho mejor”, añadió riendo. “Tiene una gran diana en la espalda ahora mismo”.
Aunque el pulso con Sinner sigue siendo uno de los grandes ejes del circuito, para Alcaraz, la relación que mantienen dentro y fuera de la pista es única. Y eso también hace que la rivalidad sea más especial aún.
“Creo que el respeto que nos tenemos y la buena relación que tenemos fuera de la pista es lo que lo hace especial”, valoró Alcaraz. “Obviamente, todo el mundo ve lo que podemos hacer cada vez que nos enfrentamos: llevamos nuestro nivel al máximo. Pero no es habitual tener una relación tan buena fuera de la pista cuando existe una rivalidad tan fuerte dentro, y creo que eso lo hace muy especial”.