ATP Tour
Hace apenas unas semanas, Carlos Alcaraz se autodefinía entre risas como un ‘servebot’ en Queen’s. Su saque fluía con una naturalidad impresionante: acumulaba aces (60 en todo el torneo, 18 solo en la final frente a Jiri Lehecka) y sacaba adelante sus turnos de servicio con contundencia. En hierba, claro, tener ese arma de su lado le ayudó a abrirse camino hasta su segundo título en Londres.
Pero algo ha cambiado desde entonces. El No. 3 del PIF ATP Rankings sigue avanzando en Wimbledon, pero su saque no es el que asombró al vestuario en Queen’s. Al menos de momento.
“Creo que aquí en Wimbledon estoy teniendo algunas dificultades con el servicio”, reconoció el español tras superar en tres sets al británico Oliver Tarvet el miércoles. “Me estoy sintiendo bastante diferente comparado con Queen’s; por las pelotas, por la velocidad. Así que estoy teniendo problemas con el saque”.
En Queen’s, por ejemplo, Alcaraz perdió dos veces su saque en los cinco partidos que necesitó para ganar el título. Las mismas veces que lo cedió en el encuentro de segunda ronda frente a Tarvet.
“Mis sensaciones no son las mismas aquí en Wimbledon”, avisó el joven de 22 años. “Estoy intentando recuperar esa confianza”, explicó.
Por eso, el campeón de cinco títulos de Grand Slam se refugió en las pistas de entrenamiento de Aorangi Park junto a Juan Carlos Ferrero y Samuel López, sus dos entrenadores, y con su hermano Álvaro al otro lado de la red. Entre las cosas que trabajaron, por supuesto, estuvo el servicio.
“Ahora mismo, el saque es lo principal para mí”, avisó el murciano. “Como dije, en hierba probablemente es el golpe más importante. Después de la primera ronda me fui de la pista nada contento con mi rendimiento al servicio. Hoy [por el miércoles] lo sentí un poco mejor, pero tengo claro que hay muchas cosas que no pueden mejorar si el saque no está a un buen nivel”, añadió con franqueza. “Me voy a centrar mucho en ello. Veremos si en tercera ronda consigo dar un paso adelante”.
Para encontrar la mejoría, Alcaraz tiene en mente el partido ante Jaume Munar, en su segundo partido en Queen’s. Aquel encuentro, que ganó en tres sets, supuso un punto de inflexión de cara al resto del torneo: desde que venció a su compatriota, con una buena actuación a la hora de poner la bola en juego.
“Después de ese partido, empecé a sacar de forma increíble”, reconoció. “Espero que aquí en Wimbledon pueda pasar lo mismo”.
Alcaraz lo tiene claro: si quiere volver a ganar Wimbledon, mejorar el saque es su próximo objetivo.
